Tengo la impresión de absorber la realidad vibratoria de un gesto que corre por ahí, pero es un gesto nonato: no sabemos cuándo ni quién lo hace ni si lo hace alguna vez pero opera no-nacido. Y a tal punto opera que por su insistencia arriban esas crisálidas aparicionales en Lulamar, que es un aspecto del fenomenío de sus criaturas, mientras que en Sasha-Min el plano meteorológico se elastiza y alisa para la navegación háptica. Suele haber ontogénesis en la pincelada más breve (la parte obviosa de su historia), pero no siempre llama a ser captada así, ahí, en flagrante acto de autoinformación cada vez que se la pesca o contempla: es la continuidad del gesto empapado en la fórmula crepúsculo.
fechas
19 de marzo –
20 de abril, 2022
texto
naKh ab Ra
trastienda
Juan Montes de Oca